MareTerra_IIIb02
MareTerra_III
Plena__NBanner

La plena es un género importante entre la música tradicional de Puerto Rico típicamente asociada con las regiones costeras de la isla. Como el corrido de Méjico, la plena es una canción narrativa que detalla los dolores y las ironías del pueblo.

Un excelente ejemplo moderno de este género es la canción El Bombón de Elena grabado por Ismael Rivera y Rafael Cortijo.

Orígen de la plena

Hay varias teorías sobre cómo y cuándo se originó la plena. La teoría más popular sobre el origen de la plena dice que surge alrededor del 1920 en el barrio San Antón, en la ciudad de Ponce, en la costa sur de Puerto Rico, según esta plena popular. Sin embargo, es más probable que fue mucho antes, como hay ejemplos de la plena en Puerto Rico y otros sitios, alrededor de 1875.

Lo que sí está claro, es que este género musical tiene raíces en la música y baile africano. Las plenas llegaron a ser popular en la primera parte del siglo 20 en las áreas de caña por la costa de la isla. La variada expresión musical de la población de esclavos, la gente común, y de la clase alta, forma el contexto para el nacimiento y el desarrollo de la plena. Además de tener sus raíces musicales y sociales en nuestra herencia de África oriental, la plena también fué influenciada por la música del jíbaro, basadas en las tradiciones de españoles y maruecos; y en la música de los salones de baile al estilo de Europa. La plena también estuvo influenciada por la música de los esclavos liberados, pero desplazados, que viajaron a Puerto Rico de las islas caribeñas de habla inglesa, buscando trabajo.

Durante la época que muchos trabajadores se trasladaron del campo a San Juan y otras áreas urbanas, la plena se hizo parte de la vida cultural urbana, tocada para entretenimiento y en las funciones sociales informales. La música se desarrolló mientras los músicos añadieron instrumentos como los cuernos a sus ritmos complicados y los soneos típicos improvisados de llamar-y-responder que también es parte de otros géneros, incluyendo bomba y salsa.

Las líricas

Las líricas de la plena se tratan de los eventos contemporáneos y por lo tanto, se dice que es el "periódico cantado". Los cantantes recitan las noticias del día y satirizan a los políticos locales o cantan de los acontecimientos escandalosos de última hora. Las plenas están repletas de sátira penetrante, pero también se tratan de las noticias importantes del día, tales como un huracán destructivo. Pero no todas las plenas son históricamente significativas o tienen el comentario social como su tema. Algunas son divertidas, o personales, juguetonas o simplemente chistosas, sin relación alguna a las noticias, la política, o la protesta. Pero sean líricas de protesta seria o una diversión alegre, la plena sigue siendo una parte importante de la expresión de la comunidad.

Cantores en una plena incluiría un solista y un coro que canta en una llamada y respuesta. El coro consiste de no más de dos cantantes, uno de los cuales pudiera cantar en armonía una octava más arriba; lo cual se llama "requintar".

La coreografía

La plena se puede bailar, pero en contraste con la bomba, la lírica y la melodía es de mayor importancia. La coreografía es bien sencilla con parejas de bailarines que bailan junto aunque la evidencia indica que originalmente bailaban separados. Mientras que la bomba no se interpreta generalmente sin bailadores, la plena sí se puede. Los percusionistas en la plena no dialogan con los bailarines como se hace en una bomba, pero tocan solos. Algunas plenas modernas se tocan a un ritmo  extremadamente rápido, inspirados por el género del reggae.

 

Los instrumentos

L a música de plena se toca en un compás de 2/4, con instrumentos que incluirían típicamente varias panderetas, que también se llaman panderos. Los panderos son los instrumentos más típicos de la plena. Un pandero es un tambor de marco similar a un "tambourine" pero sin los címbalos, y sostenido a mano. Un conjunto completo de plena requiere tres panderetas.

Además, se utilizan dos tambores que también son típicos en la instrumentación de la plena. Uno se llama la seguidora, que provee la fundación rítmica, y el segundo, que tiene el rol principal, llamado un requinto que refuerza y acentúa porciones de la estructura rítmica del texto de la canción y que también se utiliza para las descargas. Otro instrumento importante en la plena es el güiro, que principalmente se usa para tocar un ritmo fijo pero que también se puede utilizar para solos. Otros instrumentos pueden incluir un cuatro o una guitarra, y un tambor de conga y quizás una sola maraca. Un acordeón o una armónica también se pueden usar, pero éstos no son típicos. Algunos conjuntos de plena incluyen una trompeta, clarinete, u otro instrumento de viento.

La conexión a la bomba

Muchos expertos familiarizados con la música tradicional de Puerto Rico, conectan los géneros de la bomba y plena, a base de razones históricas y musicales. Postulan que las raíces de la plena se encuentran en la bomba, principalmente porque comparten muchas características musicales y son ambos claramente derivados de las tradiciones musicales de la parte oeste de África. Ambos usan dos o tres tambores de distintos tamaños y tonos para tocar ritmos interrelacionados. También, ambos utilizan a un cantante  junto a un coro, y las líricas de ambos se tratan de la vida diaria de la gente común. De hecho, los dos nombres, "bomba" y "plena" se eluden a veces, resultando en un solo término: "bombayplena", lo cual todo el mundo en Puerto Rico entiende muy bien. Pero a pesar de estos aspectos que la bomba y la plena tiene en común, hay también diferencias marcadas. Son distintas en su instrumentación por los tipos de tambores que se utilizan. Son distintas también en la forma y la importancia dada al baile, y en la estructura del verso y su contenido.

Los compositores

Como género de música folklórica, ha habido muchos y buenos compositores, algunos bien conocidos en su día y en el presente. Quizás uno de los intérpretes y compositores mejor conocido de la plena era Manuel A Jiménez, apodado como "el Canario". Ciertamente, había muchos otros, incluyendo figuras gigantes como Ismael Rivera y Rafael Cortijo.

La revitalización de las plenas hoy en día

Para la última parte del siglo 20, la plena pasó de ser la música popular preeminente del pueblo. Fue sobrepasado en el mercado comercial por la salsa, el merengue, y otros géneros más modernos. Hasta géneros importados, como la música rock, satisfizo mejor las preferencias de la juventud que le dio impulso a la industria musical, que a los viejos géneros de la música folklórica. En los años de los 60 y 70, la plena fue modernizada por los esfuerzos de artistas como César Concepción y Mon Rivera, con la introducción de instrumentos en el estilo de los "big bands": trombones, congas, y con arreglos vocales en el estilo de "soneos". Esto trajo un renacimiento de la plena que ha florecido en los años 90, con estrellas nuevas como Plena Libre.

Hasta los artistas de la salsa han tomado una parte en la revitalización de la plena. El pionero popular de la salsa, Willie Colón, grabó una serie de álbumes influyentes en los años 70 que no solamente reinterpretó la plena tradicional en el estilo de la música de salsa, pero además, invitó a los artistas conocidos de la música tradicional a ser parte de la producción. Dos grabaciones emparejaron a Colón con el maestro del cuatro en Puerto Rico, Yomo Toro. Estas grabaciones incluyeron una variedad de plenas y de música del jíbaro interpretado en el estilo de la salsa de Nueva York. Así mismo, Colón volvió a sus raíces y grabó dos álbumes con Mon Rivera en 1975-76, interpretando plenas y bombas en estilo de la salsa. El significado de estos cuatro álbumes fueron muy oportunos. Validaron la plena como género tradicional de la música, a las generaciones más jóvenes de puertorriqueños que solo le interesaba la salsa y pensaron que la vieja música tradicional era pasada de moda.

[Inicio] [Música Bailes] [Plena] [Bomba] [Danza] [Eventos] [Fotografias] [Contactanos]